Clases de Música Online en www.datemusica.com | Inscripciones Abiertas

domingo, 24 de diciembre de 2017

El cristiano vive en Esperanza

Siempre hemos escuchado que la esperanza es lo último que se pierde, pero cuando creemos en Dios nuestro Señor nunca se pierde la esperanza, pues él nos da la fe, la fuerza para seguir caminando y para seguir esperando. Veamos nuestra vida y nos encontraremos con un sin número de ocasiones donde hemos esperado algo, bien sea un juguete, un amigo, un hermano, un trabajo, un amor, una oportunidad, y en esa espera, también hemos experimentado el cansancio, la angustia, la desesperación, o la falta de fe y entonces decimos, "no lo logré", "tanto que esperé y no llegó", "no se dio", "nunca volvió", etc., en esos momentos cuando muchos de nosotros nos hemos parado a un lado del camino a ver como pasa la vida, nos sentimos derrotados, olvidados, sin esperanza, y quisiéramos que el mundo se detuviera para podernos bajar. Cuando eso pasa, solo debemos buscar con los ojos del alma a nuestro alrededor y encontraremos la luz, el faro, la guía, nuestro gran amor, JESÚS, quien renueva toda nuestra existencia, nos da la virtud de la FE, la ESPERANZA, la CARIDAD y nos impulsa a seguir caminando a pesar de las dificultades, de los obstáculos, a pesar de las caídas, a pesar de los errores, pues él nos dice: "Vengan a mí todos los que estén fatigados y sobrecargados, y yo les daré descanso (Mateo 11,28)", él nos dice: "Tampoco yo te condeno. Vete, y en adelante no peques más (Juan 8,11)"  y también con amor nos invita a seguirlo: "Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida (Juan 8,12)" 
Esta es la esperanza del cristiano, caminar junto a él, permanecer en su amor (Juan 15,8),  vivir cada día el evangelio en nuestras vidas, familias, trabajos, ciudades, o naciones, dar testimonio y anunciar su palabra de vida eterna para que otros también crean en él.

Hoy, te invito a poner todo en manos de Dios nuestro Señor, todo lo que te preocupa, lo que te angustia, las situaciones familiares, personales, sociales, económicas, políticas, el pesimismo, la queja, la culpa, el remordimiento, y dile: "Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme (Mateo 8,8)",  ábrele tu corazón, déjalo entrar, reconoce que eres débil, gloríate de tus flaquezas y habitará en ti la fuerza de Cristo (2 Corintios 12,9),  muéstrate así ante él y verás que bueno es el Señor.

Finalmente, tengamos muy presente que cuando caminamos con Jesús en nuestro corazón, a su lado siempre va nuestra madrecita María, quien nos dirá con amor "hagan lo que él les diga (Juan 2,5)" y será ejemplo a seguir (Lucas 2,19), testimonio del amor que debemos tenerle a Jesús (Juan 19,25), de la fortaleza que debemos tener para resistir las pruebas (Lucas 2,35) y de la fe para esperar y orar sin cesar (Hechos 1,14).

Que Jesús, nuestro gran amor te colme de bendiciones a ti y a cada uno de los miembros de tu familia, y que nuestra madre del Cielo te acompañe por siempre.

No dejes que nada ni nadie te robe la esperanza.
"Descansa en el Señor y espera en él." (Salmo 37,7)

Feliz Navidad para todos

El cristiano vive en Esperanza :-)
Johan
24 de diciembre de 2017

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dejar tus comentarios en el blog.